¿Quién eres tú en esto del bonsai? Parte II
Seguimos con otra entrada más de esta serie en la que, desde mi punto de vista y desde el más absoluto respeto, os defino los diferentes tipos de aficionados al bonsai que podemos encontrarnos en este arte.
Ayer nos quedamos con el aficionado inicial y hoy tenemos que empezar volviendo a él.
Si el aficionado inicial hace caso a los consejos que le van dando otros aficionados y empieza a calmar sus prisas y su ego occidental, abandona el estado de aficionado y empieza otro camino diferente, que a mi me gusta llamar el alumno iniciado.
El título de alumno no es porque pertenezca a una escuela o asista de manera continuada a clases de alguno de los múltiples lugares donde se dan cursos, demos y demás, sino es más bien referente a una persona que es capaz de aprender en cualquier situación y sobretodo, dejarse guiar en este arte.
Aquí el alumno frena sus ansias, filtra la información y empieza a vivir el bonsai desde otro punto. Le gusta ver como aparece un nuevo brote, escucha atentamente lo que le dicen y empieza a darse cuenta que el bonsai se define por muchos otros conceptos: tiempo, normas,... y amistad.
Sus árboles cambian. Ya no compra todo lo que le ofrecen y poco a poco se va viendo una mejoría en su colección. Hay un salto muy grande y puede producir dos efectos:
1. Si el alumno sigue el camino correcto, pasará a la siguiente fase y seguirá disfrutando de este arte.
2. Si vuelve la fiebre, se puede caer en un estado que puede provocar la aparición de uno de los perfiles más perjudiciales en esto del bonsai y al que volveremos más adelante.
Esta fase puede durar años, pero ya hemos dicho que el tiempo ya no lo medimos, ahora solo avanzamos.
¿Qué opináis?
2 comentarios
Muy cierto
ResponderEliminarSi , yo creo que me encuentro entre estos , me siento bastante identificado .
ResponderEliminarGracias por participar en este blog! No dejes de hacerlo!