Hace unos días, regando los bonsais me di cuenta que las zelkovas y los olmos tenían algo que no me gustaba.
Supongo que por el título habéis descubierto de que se trata....sí, es araña roja.
No es la primera vez que hablo de esta plaga en el blog, pero he decidido hacer una entrada un poco más completa sobre ella para que la conozcamos mejor y podamos prevenirla y/o tratarla en el caso de que aparezca en alguno de nuestros árboles.
¿Empezamos?
Lo primero es conocer ¿qué es la araña roja?
Vamos a empezar hablando de estos pequeños ácaros y clasificándolo taxonómicamente. Los ácaros pertenecen al grupo de los artrópodos que cuentan con una gran diversidad biológica que les permite rivalizar directamente con los insectos, en cuanto a número y hábitats en los que están presentes.
Algo que les caracteriza es su aparato bucal, ya que no cuentan con mandíbulas, por lo que la mayoría de las especies se alimentan de sustancias líquidas o semiliquidas. Nos podríamos tirar un elevado número de entradas dedicadas a hablar de los diferentes ácaros existentes pero voy a centrarme en los Tetraníquidos (Tetranychidae), ya que es esta familia la que recoge a la araña roja común (Tetranychus urticae Koch).
La familia de los Tetraníquidos es el grupo de ácaros fitófagos más especializado en cuanto a la alimentación se refiere, ya que se alimentan preferentemente de las hojas, en concreto del envés, provocando unas pequeñas manchas incoloras, como pequeños puntos, que no son ni más ni menos, las células epidérmicas absorbidas por el ácaro. Es decir, el síntoma que vamos a ver, a simple vista en nuestros árboles, es la aparición de pequeños "puntitos" amarillos en las hojas y como poco a poco la pérdida de brillo de las hojas del árbol. Y eso es lo que yo he encontrado en mis árboles
Si le damos la vuelta a la hoja, podremos ver a simple vista la presencia de colonias de este ácaro, ya que le gusta vivir en compañía de otros individuos de su misma especie y crear entre ellos unas estructuras a base de hilos de seda que les permita mantener la temperatura y la humedad constante, además de servirle de protección frente a sus depredadores naturales. Otra de las características es la rapidez en la colonización y la agresividad a la hora de alimentarse de la planta, pudiendo llegar a matar a la planta.
Las condiciones ideales para esta especie son los climas cálidos y de escasa humedad, siendo la temperatura de 32 ºC la temperatura óptima de desarrollo, y llegando a cerrar un ciclo de desarrollo en 9-10 días. ¿Qué significa esto? Pues que puede llegar a colonizar nuestros árboles muy rápidamente, ya que en condiciones ideales: alta temperatura y baja humedad, las hembras son capaces de poner una cantidad elevada de huevos y el tiempo de desarrollo es más bajo, por lo que las poblaciones se disparan.
En mi caso, llevamos unas semanas de reseco ambiental favorecido por el viento y las altas temperaturas tan extremas que estamos teniendo para ser mes de mayo (en Almería se ha superado la máxima histórica desde que se tiene referencias de las temperaturas). En la siguiente imagen, podéis ver un resumen de como la temperatura influye en el ciclo de huevo a huevo de la araña roja (Fuente: Malalis, y Ravensberg, 1992), y si le sumamos la capacidad tan elevada de las hembras de poner huevos (hasta 120 huevos a 35 ºC) nos podemos hacer una idea de lo rápida que puede ser la propagación de esta plaga.
Ahora que conocemos un poco mejor a la araña roja ¿cómo la combatimos?
Lo primero que tenemos que tener claro a la hora de combatir una plaga, sea esta o sea cualquier otra, es que debemos ser constantes en el plan que diseñemos, ya que a la vez tendremos presente en nuestros árboles todos los estadios (huevos, larvas, ninfas y adultos) y nos será difícil eliminarlo con una única aplicación.
A partir de ahora podemos optar por 3 métodos de control:
- Método mecánico. Si tenemos pocos árboles o el foco es reducido podemos optar por eliminar de manera manual la plaga mediante el uso de agua a presión o limpiando las hojas. Esto puede ser efectivo si somos meticulosos, pero en la mayoría de los casos no lo es, y dejaremos algún huevo o resto de la colonia que provoque una nueva infestación.
- Método químico. Quizás sea el más extendido. El uso de productos químicos, en concreto de acaricidas, nos permite actuar sobre la plaga de una manera directa. En el mercado hay bastantes acaricidas específicos para su uso, aunque los más extendidos son los que utilizan la materia activa Abamectina 1,8%. Deberemos tomar las precauciones necesarias para su uso y aplicar respetando las dosis recomendadas del fabricante para evitar daños en nuestros árboles. Os recuerdo que desde hace unos años es necesario el carnet de aplicador para la adquisición de estos productos y para el manipulado del mismo.
- Método biológico. Si somos respetuosos con el medio ambiente, podemos encontrar productos a base de extractos naturales que nos ayuden a combatir y prevenir esta plaga. Además, existen depredadores naturales que se alimentan de araña roja que nos pueden ayudar a tener una colección libre de enemigos y sobretodo, respetuosa con el medioambiente.
Lo que está claro, es que elijamos el método que elijamos, es necesario que hagamos un plan de acción de 2 o 3 semanas que nos permita asegurarnos de que la plaga ha sido erradicada por completo si no queremos tener de nuevo el problema y lo que es más grave, que esta nueva generación de arañas empiece a contar con resistencias a los productos que hemos utilizado para su control.
Por último solo me queda poneros un video que he grabado para que veáis como se mueve la araña en la hoja. Es curioso verdad?
Espero que os haya gustado la entrada y comentad todas las dudas que tengáis.
Un saludo
Fuentes utilizadas:
- García, F. Costa J.; Ferragut, F. 1994. Plagas Agrícolas.
- Malalis, M.H.; Ravensberg, W.J. 1992. Conocer y reconocer. Las plagas de cultivos protegidos y sus enemigos naturales.
- Portal Bonsai 74. Plagas y enfermedades de los bonsáis por Juli Pascual Lluís.