Día a día de un Bonsailover

Los trabajos realizados en el mes de mayo han dado su fruto, el árbol ha compactado, ha seguido definiendo masas y se han dejado algunos brotes que sigan cogiendo fuerza para que el árbol no detenga su formación.

Ahora ha tocado quitar algún alambre del trabajo anterior, podar esos brotes que ya han cumplido su función y seguir definiendo las masas de verde.

Que bonito está quedando!

Y que contento estoy con este árbol!

Un saludo!

A este, que procede de un esqueje, le tengo especial cariño, porque es el árbol que mi hija cogió por primera vez y dijo que ese era de ella. Así que, hay que cuidarlo!

Al igual que el ficus de la anterior entrada, únicamente he pinzado y seleccionado brotes y aquí si he podido alambrar y colocar algún tensor para seguir mejorando.

Y si a su dueña, le encanta el resultado...el trabajo es de 10!

Un saludo y feliz semana a todos!

Siguen subiendo las temperaturas y dónde mejor se puede pasar este calor es en el rincón de los bonsai, trabajando y disfrutando de ellos. Y antes de darles su merecido descanso, seguimos trabajando sin descanso los ficus.

En este caso, un pequeñin que llegó a casa como material de una gran superficie y que poco a poco empieza a ser un ficus con carácter.

Este año no le tocaba defoliación completa, por lo que solo se ha pinzado dejando un par de hojas por rama y respetando el trabajo que ya hay hecho.

El resultado:

Y una foto con la que os deseo un feliz verano!

Normalmente, las ramas que caen suelen ser más lentas en su desarrollo y cuesta más formarlas, por este motivo hay que ser paciente e ir poco a poco en su diseño. El trabajo ha consistido en un defoliado parcial con una poda de formación, para evitar ramas que se crucen y favorecer que la luz entre en el interior, haciendo que la brotación trasera se estimule y el diseño sea más compacto.

Poco a poco, con ayuda de tijeras y pinzas...

Al final, y un montón de hojas más tarde...

El resultado es el siguiente:

Este tipo de trabajos bien ejecutados favorece la formación del árbol y si coincide con un plan de abono adecuado, los resultados son muy agradecidos.

Un saludo y nos vemos en la siguiente entrada!

Una de las cosas que hay que tener claro en este arte es que la paciencia es nuestra compañera de viaje en este particular camino. Debemos aprender a esperar, a respetar los tiempos y a saber trabajar aún sabiendo que el objetivo todavía está lejos.

Constancia, paciencia y respeto. Son las tres claves que nos harán avanzar poco a poco y disfrutar del camino será uno de los resultados obtenidos. El otro resultado es más que evidente...

Ya queda menos para llegar a nuestro objetivo. Mientras tanto, seguiremos disfrutando de cada paso.

Que raro...esto del bonsai se parece mucho a la vida...