Tratamientos de primavera

by - abril 14, 2020

Esta primavera está siendo diferente en todos los sentidos.

A parte de la situación de confinamiento que estamos llevando, llevamos unas semanas que la lluvia está presente cada 3 o 4 días, y es que, aunque el refrán sea en abril aguas mil, en Almería es raro que vivamos en los últimos años un episodio de lluvias tan seguido y eso es muy bueno!

Pero no podemos bajar la guardia. Al final se traduce en un exceso de humedad que puede provocar la aparición de problemas relacionados con hongos, por lo que tenemos que estar pendientes y programar este tipo de tratamientos en nuestro calendario de trabajos.

Es cierto que existen tratamientos de productos fungicidas con una fama de éxito muy alta en el mercado, pero en mi caso, prefiero tirar de algunos productos que a parte de potenciar el sistema inmunitario de la planta, nos sirven como aporte de algunos elementos nutritivos, como es el caso del fosfito potásico.


Así que hoy ha tocado un repaso a los árboles, ya que se esperan lluvias intensas para mañana y el día de hoy es ideal para dar el tratamiento, por ser un día soleado pero sin excesiva radiación y con buena ventilación, lo que permite una aplicación óptima en todo el árbol y nos facilita su asimilación por parte de los bonsai.

¿Qué es el fosfito potásico? Pues se trata de la mezcla de dos compuestos químicos (el fosfito monopotásico y el fosfito dipotásico) que dan como resultado una sal blanca soluble en agua y que cuenta con propiedades fungicidas y bioestimulantes en la planta que favorecen una serie de reacciones que ayudan al sistema inmune de las plantas. La particularidad del ion fosfito es su facilidad a la hora de penetrar en los tejidos de las plantas y favorecer la distribución de los elementos a los que está asociado, en este caso el potasio. Por otra parte, el ion fosfito forma parte de un montón de rutas metabólicas relacionadas con la superación de momentos de estrés (podas, trasplantes, pinzados), así como en la formación de estructuras que favorecen los mecanismos de defensas naturales.

Lo más importante, y por lo que me gusta emplearlo, es que a diferencia de los productos fungicidas químicos, el fosfito potásico no "frena" a la planta tras su aplicación, ya que no genera un impacto tan fuerte como en el caso de algunos productos que todos conocemos. Y por eso me gusta incluirlo en mis tratamientos de primavera, porque podemos seguir viendo crecer a nuestros árboles y les ayudamos previniendo posibles enfermedades.

Espero no haberos aburrido mucho!

Un saludo a tod@s!



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